domingo, 22 de marzo de 2015

ES UNA OPINION QUE DUELE LEERLA

Israel se merece este gobierno

La primera conclusión a la que se llegó sólo minutos después del anuncio de los sondeos de boca de urna fue particularmente desalentadora. Hay que reemplazar la nación. No se precisa otra elección para la dirigencia del país, sino elecciones generales para escoger un nuevo pueblo israelí –de inmediato–. El país lo necesita urgentemente. No podrá resistir otro período de Benjamin Netanyahu, quien emergió como el hombre que formará el próximo gobierno.
Si después de seis años de nada, después de seis años sembrando miedo y ansiedad, odio y desesperación, esta es la elección de la nación, entonces está verdaderamente muy enferma. Si después de todo esto, el fénix israelí logró levantarse de las cenizas y ser reelegido, si después de todo esto el pueblo israelí lo prefirió para dirigir durante otros cuatro años, algo está verdaderamente roto, tal vez irreparablemente.
Netanyahu merece al pueblo israelí y éste se lo merece. Los resultados indican la dirección que toma el país. Una proporción significativa de israelíes ha terminado por separarse de la realidad. Es el resultado de años de lavado de cerebro y de provocación. Esos israelíes votaron por el hombre que llevará a EE.UU. a adoptar medidas duras contra Israel, por el hombre del que el mundo está harto hace mucho tiempo. Votaron por el hombre que admitió que engaño a la mitad del mundo durante su discurso de Bar-Ilan; ahora se ha sacado la máscara y ha desautorizado esas palabras de una vez por todas. Israel dijo “sí” al hombre que dijo “no” a un Estado palestino. Queridos votantes del Likud, ¿a qué diablos decís “sí”? ¿Otros 50 años de ocupación y ostracismo? ¿Creéis verdaderamente en eso?
El martes se colocaron los fundamentos para el Estado de apartheid que está por venir. Si Netanyahu logra formar el próximo gobierno en su espíritu e imagen, la solución de dos Estados será finalmente enterrada y comenzará la lucha por el carácter de un Estado binacional. Si Netanyahu es el próximo primer ministro, Israel no se habrá divorciado sólo del proceso de paz, sino también del mundo. Al diablo, querido mundo, estamos solos. Por favor no interfieran, estamos dormidos, el pueblo está con Netanyahu. Los palestinos podrán calentar los escaños en el Tribunal Penal Internacional en La Haya, los boicoteadores de Israel podrán ponerse en marcha y Gaza puede esperar el próximo cruel ataque del ejército israelí.
La batalla por todo esto aún no ha sido oficialmente decidida. El próximo primer ministro será ungido por Moshe Kahlon y los jefes de otros pequeños partidos. Al escribir estas líneas, Kahlon todavía no ha declarado su intención. De esos partidos depende; ellos decidirán si Netanyahu continúa. La mayoría lo desprecia, pero es dudoso que tengan el valor de dar la espalda al público. Esa será su prueba. Esa será la prueba de su coraje e integridad. Moshe Kahlon y Aryeh Dery, ¿creéis verdaderamente que Netanyahu es mejor que Isaac Herzog para la sociedad y el bienestar social que pretendéis defender? ¿Cree el presidente decente y valeroso del país, Reuven Rivlin, que Netanyahu será un mejor primer ministro que Herzog? Mucho depende de él actualmente – pero el hecho de que un personaje como Netanyahu y un partido como Likud lograron mantener el poder como la principal facción del país ya resulta muy significativo.
Netanyahu amenaza con sobrepasar a David Ben-Gurion como el líder con más tiempo en el puesto de primer ministro. Ya ocupa el segundo lugar, y cuesta pensar en un solo logro significativo por su parte. La lista del daño que ha cometido es larga. Pero es el elegido por la nación, o gran parte de ella. Hay que respetar esa elección, incluso si dificulta que se llegue a un buen resultado. El único consuelo es que otro período de Netanyahu provocará la acción del mundo. Esa posibilidad es nuestro único refugio.

1 comentario:

  1. Gracias por postearlo. ¿Vos lo tradujiste, Adrián? ¿Se consigue en inglés? Saludos. Te pongo en el blogroll

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