Por Ariel Boffelli.- Miguel Ángel Pichetto lanzó su proyecto provincial junto a Ana Piccinini. La presencia de Martín Soria, con el que se apaciguaron los conflictos, trae un poco de aire fresco antes de las elecciones municipales del 3 de mayo. Impulso para junio donde se enfrentará con Alberto Weretilneck y Magdalena Odarda.
Con el PJ unido, Pichetto presentó su fórmula (Foto: Patagonia FotoPress).
Este lunes fue otro día movido para Miguel Ángel Pichetto que se olvidó del fastidio por las ideas y vueltas con Martín Soria, en lo que fue el anuncio de la fórmula oficial para pelear la gobernación de Río Negro que significó la nueva realidad del PJ, que logró calmar las aguas luego de un final de semana complicado en el que el Senador y el Intendente lograron ponerse de acuerdo en el cierre que terminó de florecer este mediodía en Viedma.
Acompañado de Ana Piccinini, (la candidata a vicegobernadora), intendentes, legisladores como el diputado nacional Jorge Cejas y referentes de toda la provincia volvió a mostrarse como la mejor opción para derrotar en junio a un ex aliado: el gobernador Alberto Weretilneck.
“Me parece muy importante destacar acá la presencia de los más importantes dirigentes del justicialismo, el Frente Grande, Kolina y los compañeros de La Cámpora”. Así comenzó a agradecer Pichetto a cada uno de los sectores que apoyan su proyecto.
Siempre atento a reconocer las fuerzas kirchneristas, no dudó un segundo en advertir la necesidad de que la unidad lograda en 2011 cuando Soria padre ganó una histórica elección se repita. “Quiero destacar la presencia de Martín (Soria), la de Maru Martín y de todos los compañeros que se acercaron hasta Viedma”, destacó Pichetto.
“De lunes a lunes vamos a trabajar. Esta consigna encierra nuestro pensamiento de ser una provincia mejor, y estamos convencidos de que lo podemos lograr con un sentido de eficacia en el ámbito del Estado. Debemos aportar los mejores recursos humanos en la gestión con toda la energía y dedicación para transformar la realidad”, volvió a plantear, antes de enumerar los proyectos que tiene. “Buscamos volver a proyectar una provincia con equilibrios que en el plano institucional incorpore nuevas miradas y trabaje para ordenar el Estado, no para ajustarlo. Queremos que se haga cargo de sus responsabilidades”, sostuvo sin olvidarse de reconocer el esfuerzo de varios postulantes a diferentes cargos que le dejaron un lugar a “otros compañeros”.
El cierre de listas, que tantos dolores de cabeza trajo en la previa del fin de semana largo, fue la causa de que la tan ansiada unidad tarde en hacerse oficial. “Muchos de los presentes hicieron un gran esfuerzo al resignar lugares. Varios de ellos fueron intendentes y, sin embargo, no están en las listas pero el respaldo de ellos hace posible un proceso difícil porque los partidos mayoritarios no son un liceo de señoritas”, dijo el máximo conductor del justicialismo de esa provincia.
“Experiencia, lealtad y compromiso”, fue lo que prometió para la transformación en Río Negro más la “contracción al trabajo” que les servirá para recuperar la idea de la eficacia gubernamental, una de las mayores críticas del FpV a la gestión de Weretilneck. La demanda para convertir a la provincia en “ganadera, minera, petrolera y frutícola” fue algo que remarcó antes del cierre: “Vamos a tener un Estado mejor si aumentamos el producto bruto interno, es por eso que necesitamos la fuerza de la Universidad Nacional de Río Negro”.
“Cuando uno está en el Gobierno el nivel de cuidado y protección en cada una de las áreas implica responsabilidad de carácter institucional, de sus ministros, secretarios, directores o empleados. Si hay alguien, que en esa cadena, ha cometido el grave delito de corromper menores o inducirlos a la prostitución el gobierno tiene que actuar en consecuencia”, advirtió Pichetto, antes de finalizar, sobre el escándalo de prostitución infantil que deja mal parada a la actual gestión provincial.
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